Las baterías para dispositivos inteligentes que usamos ahora tienen los días contados. Al menos eso pareciera en razón de los últimos avances en este terreno, donde se crean nuevos medios y arquitecturas para desechar la tecnología actual.
En el más reciente avance, un grupo de científicos suizos, apoyados por la Swiss National Science Foundation (SNSF), ha creado un nuevo modelo de batería recargable, que deja de lado los iones de litio para centrarse en el uso de sodio magnesio como componentes principales.
El nuevo modelo de batería de sodio y magnesio tendría distintas ventajas sobre las alternativas actuales, como el uso de materiales sólidos, sin necesidad de compuestos líquidos o flamables como los utilizados hoy en día.
Crear una batería de estado sólido representó un reto importante, pero la gente de la SNSF pudo concebir las bases de un nuevo sistema de electrolitos sólidos con estructura cristalina, sustituyendo el litio de manera absoluta. Sin embargo, la arquitectura de esta nueva estructura aún no está terminada al 100%.
En teoría esta batería de sodio y magnesio puede activarse e iniciar su funcionamiento a una temperatura ambiente de 20 grados centígrados, y es capaz de soportar calores de hasta 300 grados, pero el diseño final y el proceso de manufactura aún deben ser definidos.
De todas formas el SNSF ha creado una alternativa atractiva para el futuro cercano.
