(Para 4 personas)
La masa:
400g de harina de trigo
4 huevos
1 cdta de sal
100g de semolina
Aprox. 220 ml de agua
Mantequilla
Ponemos en un cuenco amplio la harina tamizada; añadimos los huevos ligeramente batidos, la semolina y la sal. Incorporamos poco a poco el agua tibia mientras mezclamos con unas barillas grandes de batir o cuchara de madera. Debemos obtener una masa densa y brillante que, al levantarla con la cuchara, tarde en caer.
Dejamos reposar la masa unos 15 minutos y la volvemos a mezclar brevemente, añadiendo 1-2 cucharaditas de agua si es necesario
Cebollas caramelizadas:
2 - 3 cebollas
3 cdas de harina
200 g de mantequilla
Sal
Cortamos las cebollas en aros finos y los rebozamos en harina.
En una sartén, derretimos la mantequilla sin dejar que se caliente demasiado y doramos las cebollas.
Las sacamos de la sartén y las dejamos escurrir en una fuente con papel de cocina. Salpimentamos.
Preparación de los spätzle
300g de queso montañés
150g de emmental
4 cdas de hierbas frescas
En una olla grande ponemos agua con sal a hervir. Al lado, preparamos un recipiente grande con agua fría. Allí vamos a sumergir los spätzle que saquemos del agua caliente para que no pierdan su forma.
Trabajaremos con una tabla de madera chiquita, un cuchillo y un cucharón de sopa. Cuando el agua rompa a hervir, humedecemos bien la tabla y la sumergimos unos segundos en la olla.
A continuación, llenamos un pequeño cucharón de masa, lo vertemos sobre la tabla y la alisamos con el cuchillo. Sostenemos el extremo de la tabla sobre la superficie del agua y comenzamos a raspar/cortar con el cuchillo finísimas tiras de masa que irán cayendo directamente al agua hirviendo.
Tan pronto como los spätzle salen flotando a la superficie están listos. Los sacamos con un escurridor y los pasamos al recipiente con agua fría.
Mientras tanto, picamos el cebollino y reservamos.
Poco antes de servir, calentamos una pizca de mantequilla en una sartén y salteamos los spätzle con una cuchara de madera. Rallamos por encima el queso montañés y emmental. Cuando comiencen a derretirse, retiramos la sartén del fuego.
Justo antes de servir, cubrimos los spätzle con queso con las cebollas caramelizadas y las hierbas frescas.
¡Buen provecho!
