Sin duda una de las pegas recurrentes de los consumidores en relación a los coches eléctricos tienen que ver con su autonomía. Los 100-200 kilómetros que se barajaban en la actualidad pasará a la historia. La percepción actual cambiará notablemente con las baterías de grafeno, la autonomía actual será muy superior. También podemos hablar de márgenes de mejora en el peso, y la aerodinámica. Incluso la autonomía de los coches. Tesla, de 400 kilómetros será irrisorio. El Tesla Model, S 85, dispone de una capacidad bruta de 85 kWh, es decir, tres veces y media más capacidad que un Nissan, Leaf o un BMW, i3. Por otra parte, el Model, S es un coche de alta gama, (segmento, E), es grande, (casi 5 metros de largo), y su precio es bastante lejano al que puede asumir el bolsillo del ciudadano común actual, pero es que las baterías de grafeno fabricadas en España supera, incluso ridiculiza esos datos, pues dispondrán de 800 a 1000 kilómetros de autonomía. Graphenano, ahora mismo serían capaces de fabricar una batería de 93 kWh, que ocuparía el mismo espacio que una de litio de 70 kWh. Un 32% de incremento y además, con una reducción del peso. Con las baterías de Grafeno.
En la báscula, un mismo coche pasaría de unos, 2115 kilos, hasta los, 1925 kilos. Un 13% menos. Según la información, las celdas (no el pack) pasarían de pesar 279 kilos a apenas 89 kilos. Es una reducción drástica. Elon Musk, predecia que en 2025 coches eléctricos [de su marca]serían capaces de hacer 800 kilómetros por carga. Pero en el 2016 ya es una realidad, y de mano de unos españoles. Adiós a sus previsiones, y sus calculos.. y por otro lado los productos, Tesla, temblando.. Seguro que a más de uno se le han iluminado los ojos, ¡la autonomía de un coche convencional¡ Prácticamente dobla la automía de un Model S 85¡ o del, BMW, i3, REX. ¡Qué hay de la recarga en ruta¡ , pues, Modelos híbridos ya no tendrán ningún sentido. Coches de energía solar tampoco. Los únicos coches que, a día de hoy, permiten viajar solo a base de la luz del sol, son prototipos desprovistos del menor confort. Solo se usan para demostrar que la tecnología lo permite, pero no es cómodo. Existen aviones solares, efectivamente, con las alas repletas de paneles. En un coche no caben tantas células fotoeléctricas, nos pongamos como nos pongamos. Pero tampoco son ya necesaríos. ¡Y si hablamos de generar energía a bordo¡ . Adiós. Descartando, por razones obvias, la nuclear, tenemos la pila de combustible de hidrógeno, y eso ya está inventado. Es un concepto distinto de coche eléctrico, la energía que se necesita se obtiene de la reacción del hidrógeno (H2) con oxígeno (O2) para dar lugar electricidad, y vapor de agua (H2O). Los motores siguen siendo eléctricos, y el concepto de repostaje es similar al de un coche convencional¡ mucho más rápido, pero es “caro”. Ya no viable en absoluto. Si entendemos el rendimiento de las baterías de grafeno españolas, con una capacidad de recarga incluso en 5 minutos. Parece que las baterías para los coches eléctricos vienen siempre de muy lejos, de Japón, de Corea, o de algún otro, incluso aún más lejano. Sin embargo en España se ha desarrollado una nueva batería recargable y tiene todo, más potencia, más densidad de carga, más vida útil, mayor velocidad de recarga, y menor precio. Lo de recargable es importante, porque las hay que no lo son, como aquellas de aluminioaire con 1.600 km de autonomía. Todo gracías a
Graphenano, empresa española que produce grafeno industrial desde 2012, la Universidad de Córdoba y Grabat Energy, otra empresa española que fabricará las celdas de batería. Una cosa esta clara. Serán los artífices de la tercera revolución industrial. El proceso de industrialización cambiará su naturaleza. Actualmente se puede fabricar una batería más barata y se pueden tener coches eléctricos con una autonomía, al menos homologada, de entre 800 y 1.000 km. Y para colmo estas nuevas baterías tenían un inconveniente de su densidad en volumen, pero los investigadores de la Universidad de Córdoba lo han resuelto de tal manera que son ahora mas pequeñas que las tradicionales de lítio. Todo gracias a: Grabat Energy que abre la primera planta de fabricación de celdas de polímeros de grafeno en este 2016. La noticia es buena, y habiendo sido desarrollada en España, la noticia es si cabe todavía mejor. Si. Empresa española Graphenano, a través de su filial Grabat Energy, junto a su socio chino Chint.

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