Poco antes de la media noche del Sábado de Pasión, y a las puertas del Domingo de Ramos, el Palio de la Virgen de la Esperanza hacía su entrada en la Plaza de Santo Martino, justo detrás de la Basílica de San Isidoro de León. La Plaza repleta de gente para ver como se recoge una de las "Reinas" de León.
En los once años en que lleva procesionando ya se cuentan por centenares los devot@s, yo entre ellos, que salen a verla procesionar por las calles y ver como reparte Esperanza entre todos nosotr@s.Sus "privilegiad@s" bracer@s (modo envidia total activado), año tras año, la llevan sobre sus hombros en volandas y la devuelven de la misma manera a su casa. Ese caminar distinto, a carrerinas dicen algunos, hacen que su palio se mueva como ningún otro en León, dándole un aire y un toque único en nuestra ciudad.
En la llegada de este año sonó por primera vez en procesión la marcha Heredaras Mi Reino de Daniel Yubero Recio y, no podía ser de otra manera, a pesar del cansancio de sus esforzados discipul@s lució en todo su explendor Nuestra Señora de la Esperanza y de esta manera nos pudo dejar un gran regusto que hace que ya tengamos ganas de que llegue el Sabado de Pasión 2016.
