Este miércoles, 24 de enero, tuvo lugar un dramático accidente cuando un avión de las fuerzas armadas de Rusia se estrelló en la región de Bélgorod, cerca de la frontera con Ucrania, llevando a bordo a más de 60 prisioneros ucranianos.


El Ministerio de Defensa, que ha mantenido detalles escasos sobre el siniestro, ha confirmado que en el interior de la aeronave, un Il-76, viajaban 65 prisioneros, tres acompañantes y 6 tripulantes.


Dimitri Pescov, portavoz del Kremlin, informó que las autoridades ya están trabajando para esclarecer las circunstancias de este trágico incidente.

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