Después de una serie de fracasos en sus aspiraciones de convertirse en actriz, Indirita jura por la vida de su guanajo Univaldo que nunca volverá a presentarse a un casting. Pánfilo recibe una llamada que lo complican todo, y deberá convencer a Indira de que se presente a un último intento en el casting, mientras le oculta que efectivamente se murió el guanajo.
