El técnico de Atlético Nacional, Efraín Juárez, quedó en el centro de la polémica tras una provocadora celebración frente a la hinchada de Independiente Medellín al término del clásico paisa, que definió el paso de Nacional a la final de la Copa Betplay. Su gesto desató abucheos, gritos y una tensa reacción entre los aficionados del Medellín. La Policía intervino, conduciendo al técnico para imponerle un comparendo por incitar a la violencia. Aunque Juárez ofreció disculpas públicas en rueda de prensa, el incidente subraya la importancia de mantener la compostura en eventos deportivos para evitar malentendidos y tensiones entre hinchadas rivales.

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