Quien visita el bello municipio cordobés de Belalcázar se sorprende por su gran patrimonio histórico, muy similar a la de ciudades como Úbeda o Baeza. Este pueblo serrano, de poco más de 3400 habitantes, situado a 100 km de la capital de la provincia y casi en la linde de la provincia extremeña de Badajoz, se encuentra encaramado entre el verdor de sus dehesas y los ríos Zújar y Guadamatilla.
