La princesa Ana y la reina Camila se convirtieron en cuñadas cuando Camila se casó con el príncipe Carlos, el hermano mayor de Ana, en el año dos mil cinco. Desde que Camila se unió a la familia real, ha desarrollado una relación estrecha con la princesa real, y frecuentemente se las ha visto juntas en eventos oficiales. Sin embargo, estas dos laboriosas damas reales no siempre fueron tan cercanas como lo son ahora. La experta en lenguaje corporal Judi James señala que en las fotografías de la boda de Carlos y Camila, tanto Ana como sus padres, la reina Isabel Segunda y el príncipe Felipe, parecían seguir teniendo dudas acerca de la inclusión de Camila en la familia real.
