La depresión es una tormenta que se apodera de las almas de muchos. Es una tormenta que trae monstruosas olas, enormes marejadas, y a veces te hace sentir como si fueras a zozobrar, posiblemente a ahogarte. Aunque te sientas irremediablemente perdido, recuerda que Jesús está en esa barca contigo.

Hay diferentes formas en que las personas eligen lidiar con la depresión: hablar con un terapeuta, hacer ejercicios, apoyarse en la familia o en los amigos, o recurrir a Dios.

Estudia y medita en las Santas Escrituras ya que en ellas podrás encontrar paz y alegría en medio de circunstancias y sentimientos deprimentes. ¡Puedes superar la depresión con la ayuda de Dios y su Espíritu Santo!

Aquí hay algunos versos de la Biblia para recordarte la fuerza y el amor que el Señor te regala cada día sin importar lo que hagas. A continuación descubrirás y aprenderás de los versículos bíblicos más notables sobre la depresión!

Deuteronomio 31:8
“El Señor mismo va delante de ti y estará contigo; nunca te dejará ni te abandonará. No temas, no te desanimes”.
1.- Deuteronomio 31:8
No tenemos nada que temer en la vida porque Dios camina a nuestro lado. Cuando te sientas solo recuerda que aunque no haya nadie más, Él está. Cuando experimentes sentimientos de miedo recuerda que Él nunca te dejará. Otras personas vendrán y se irán, pero Dios nunca te dejará.

Filipenses 4:8
“Por último, hermanos y hermanas, todo lo que es verdadero, noble, justo, puro, hermoso, admirable, si algo es excelente o digno de alabanza, piensen en esas cosas.”
2.- Filipenses 4:8
Aunque haya tiempos difíciles u oscuros, tomarse el tiempo para estar agradecido y reflexionar sobre las cosas que son buenas puede levantar el ánimo.

Filipenses 4:13
“Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”.
3.- Filipenses 4:13
La depresión puede agotar tu energía y hacer que te sientas casi imposible cumplir incluso con tareas simples. Pero este versículo te recuerda que Cristo siempre está ahí para ti. A través de él, puedes encontrar la voluntad para superar incluso los momentos más oscuros.

Juan 16:33
“Os he dicho estas cosas, para que en mí tengáis paz. En este mundo tendréis problemas. ¡Pero tened valor! He vencido al mundo”.
4.- Juan 16:33
Jesús sabe que experimentarás tiempos difíciles. Estas palabras reconfortantes pueden ser una fuente de fuerza al reflexionar sobre su amor por todos nosotros. A través de la fe, puedes superar los obstáculos en tu vida.

Jeremías 29:11
“Porque yo sé los planes que tengo para ustedes, declara el Señor, planes de paz y no de mal, para darles un futuro y una esperanza”.
5.- Jeremías 29:11
Hay mejores tiempos por delante. Dios tiene un plan para ti, incluso si tus circunstancias actuales son difíciles.

Mateo 11:28
“Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.”
6.- Mateo 11:28
Los sentimientos de depresión pueden ser una carga pesada, y muchas personas cometen el error de pensar que es una carga que deben llevar solos. Este versículo sirve como un recordatorio de que Jesús está ahí para levantar tus cargas y proporcionarte alivio.

Proverbios 3:5-6
“Confía en el Señor con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propio entendimiento. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus senderos.”
7.- Proverbios 3:5-6
Cuando estás luchando con la depresión, puede ser difícil entender por qué sientes ciertas emociones. Este versículo te recuerda que el camino a seguir es confiar en el Señor para que te guíe. Las cosas se verán mejor.

1 Pedro 5:7
“Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él os ama”.
8.- Pedro 5:7
La depresión y la ansiedad pueden ser experiencias aislantes. Pero Jesús está ahí, y se preocupa por ti. Puedes acudir a Él para que te ayude con lo que sea que estés sintiendo.

Salmo 23:4
“Aunque camine por el valle de la sombra de la muerte, no temeré ningún mal, porque tú estás conmigo; tu vara y tu cayado me reconfortan”.
9.- Salmo 23:4
Este versículo sirve como un recordatorio del amor de Dios por nosotros. Incluso en tiempos oscuros cuando te enfrentas a situaciones difíciles, Él camina a tu lado y te guía por un camino recto hacia adelante.

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