AMAIA ORMAETXEA Y RAQUEL MORENO. Javier Milei lleva ya un año al frente del gobierno argentino.
Llegó a la Casa Rosada armado con su icónica motosierra. Le costó arrancarla pero finalmente ha conseguido ponerla en marcha, con resultados desiguales. Las cifras macroeconómicas son buenas y gustan a los mercados, pero la pobreza y la desigualdad han aumentado de manera significativa. En este contexto, Milei espera con ganas, la llegada a la Casa Blanca de sus aliados políticos, Donald Trump y Elon Musk.
En estos doce meses, Argentina no sólo ha conseguido reducir su déficit fiscal, sino que en los diez primeros meses de este año se ha anotado un superávit del 0,5%. La inflación también se ha recortado de forma drástica. El gobierno de Milei ha asegurado que cumplirá con sus acreedores internacionales y que la economía del país avanzará un 5% el año que viene.
Sin embargo, estos logros, no han llegado de forma aséptica. Los recortes sociales llevados a cabo para reducir el déficit han elevado la tasa de pobreza, que ha aumentado diez puntos y ahora alcanza a más de la mitad de la población del país. Los empresarios tampoco están especialmente satisfechos: Milei ha eliminado los aranceles que pesaban sobre las importaciones que llegan al Argentina. esta medida supondrá un alivio para el bolsillo de los consumidores, pero los empresarios se quejan de que perjudicará la producción nacional.
Su política de aranceles es radicalmente opuesta a la que defiende su aliado político Donald Trump. Sin embargo, Milei está ideológicamente muy alineado con los postulados políticos del presidente electo de Estados Unidos y, en general, con los de la extrema derecha internacional: niega el cambio climático, las políticas de género y lanza ataques furibundos contra la prensa con un lenguaje y unas actitudes agresivas y populistas.
No es casualidad que Milei se convirtiera en el primer mandatario extranjero que se reunió con Trump tras su victoria en las elecciones presidenciales. El presidente argentino mantiene también una relación de amistad con Elon Musk, el magnate se reconoce como libertario, al igual que el presidente argentino y comparte también con él su apuesta por recortar al máximo el peso del Estado, algo que podrá poner en marcha durante los próximos cuatro años desde su puesto como responsable de recortes en el gobierno de Estados Unidos.
#milei #argentina #trump
Ещё видео!