La Puerta del Sol es una de las 5 grandes puertas de acceso al casco histórico que quedan en pie en la actualidad y, bajo mi punto de vista, también es una de las más bonitas e impresionantes. Se encuentra en el paseo del miradero, en la subida que va desde la puerta de Bisagra a la plaza de Zocodover.

Atravesar sus arcos de herradura es hacer un viaje en el tiempo cientos de años atrás, cuando Toledo era una ciudad bajo dominación árabe.

En su origen esta puerta era una torre albarrana que defendía el acceso a la ciudad musulmana. Para todos aquellos que, como yo, os lo habeis preguntado, la albarrana es una torre adelantada al resto de la muralla.

Es en el S. XII cuando aparece la primera referencia como puerta de acceso a la Medina de la ciudad Arabe, aunque de esta época se conservan pocos elementos.

Su impresionante estilo mudéjar militar actual se debe a la reconstrucción llevada a cabo en el S. XIV por los caballeros hospitalarios.

Además, esta puerta guarda una leyenda negra que gira en torno a dos misteriosas figuras que se aprecian en su fachada:

Corria el año 1220 Toledo contaba con un alcalde corrupto, que tenía atemorizada a la ciudad. Sometía a sus habitantes a grandes impuestos y deshonraba a las jovenes de las que se encaprichada con la la falsa promesa de desposarlas. Muchas fueron las que se quitaron la vida al ver incumplida la palabra de este tirano.

En aquellos días el rey Fernando III el santo se encontraba la plaza de Zocodover atendiendo las peticiones y quejas de sus súbditos. Sin embargo, nadie se atrevió a denunciar la situación por miedo a las represalias.

Cuando el rey estaba dispuesto a dar por terminada la audiencia del dia, una joven se acercó a el y llorando, se arrodilló a sus pies pidiendo justicia. Posteriormente sería otra jovencita, casi era una niña, la que denunciara el ultraje del infame Alcalde.

El valor de ambas inspiró al resto de toledanos que se volcaron a denunciar los sucesivos abusos. El rey viendo la palidez en la cara del Fernando Gomez se dio cuenta que todas las acusaciones eran ciertas y decidió ajusticiarlo en el momento y ejecutarlo.

Cuenta la leyenda que el rey ordenó esculpir en la fachada de la Puerta del Sol la figura de las dos jovenes sujetando una bandeja de plata con la cabeza del alcalde.

Sin embargo y para vuestra tranquilidad os diré que esta historia no es verdadera. Lo que hay incrustado encima de los arcos de herradura es en realidad un sarcofago romano y las figuras representan la negación de San Pedro.

Y ahora un dato curioso: ¿sabiais que el nombre de esta puerta viene del medallón de su fachada? en el aparecen el sol y la luna sobre una escena que representa la imposición de la casulla a San Ildefonso por parte de la Virgen María?

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