El gigantesco gusano Bobbit, que puede alcanzar 3 metros de longitud, está completamente sumergido en la arena del fondo. Ataca todo lo que parece estar a su alcance. Posee mandíbulas poderosas y afiladas, capaces de cortar a su presa por la mitad. Sin embargo, pequeños peces han desarrollado una técnica de seguridad contra él. Se unen en un equipo y, estando fuera del alcance del adversario, utilizan corrientes de agua para desplazar la arena que lo cubre, privando a la amenaza de su principal arma: el factor sorpresa. Al ver al gusano desenmascarado, los demás peces pueden alimentarse tranquilamente y evitarlo sin preocuparse de que algo los arrastre bajo tierra. ¡Pero la regla principal de cualquier técnica de seguridad es seguirla siempre!
Ещё видео!