Los planes de sucesión están tomando cada vez más importancia dentro de las organizaciones.
Hoy tenemos 3 retos fundamentales:
1. el tema de sostenibilidad
2. equipos intergeneracionales y
3. la dificultad de conseguir talento
Si estos 3 retos los asociamos a un plan de sucesión, logramos un efecto diferencial versus otras organización. Las compañías que mapean su talento saben identificar cuáles son las palancas y los frenos de sus colaboradores y de esta manera pueden facilitar un posible plan de sucesión.
Los planes de sucesión se hacen evidentes cuando encontramos un ejecutivo que por x razón se va de la compañía, o porque se pensiona o porque decide no estar trabajando más dentro de la compañía, pero si esto ya lo tenemos facilitado porque hemos hecho un plan de sucesión claro identificando cuáles son esas fortalezas y esas capacidades que tienen nuestros colaboradores, podemos salir de estos procesos de manera eficiente.
Adicionalmente cuando los colaboradores se sienten mapeados, cuando sienten que hay un proceso para el cual están trabajando, que hay un plan de desarrollo que está en línea con sus expectativas, generamos una amplia fidelización de nuestros colaboradores y de esa manera, una marca empleadora que genera mucho impacto organizacional.
