Alberto Muzzopappa está a cargo de la sodería que hace muchos años montó su padre. Está a punto de perder su
negocio por lo que decide aceptar la oferta de Hipólito, el padre de Sofía, de comprar la fábrica.
Alberto pretende quedarse con un pequeño porcentaje y el gerenciamiento de la sodería, sin saber que el plan de
Hipólito y su socio Orlando, la pareja de Sofía, es tirar abajo la fábrica para levantar allí una moderna torre. Sofía
es psicóloga y sexóloga. Acaba de mudarse a la casa de sus padres en el barrio natal. Crió sola a su hijo de siete
años. Su vida se verá alterada cuando irrumpa en su corazón la presencia de Alberto: emocional, apasionado,
fogoso y seductor.
Alberto y Sofía se enamoran a primera vista. Y aunque piensan de manera diferente acerca de las distintas
situaciones que propone la vida, cuando no se ven no pueden dejar de pensar en el otro.
Sofía dilata la insistente propuesta que le hace Orlando de convivir, porque en el fondo no está enamorada de él.
Además siente que Orlando no tiene un buen vínculo con su hijo. No le sucederá lo mismo con Alberto que
establecerá con el niño un vínculo afectivo que muchas veces reemplazará la imagen del padre ausente.
Y esto la colmará de problemas. Porque Alberto no es hombre de una sola mujer. Tiene romances con muchas de
sus clientas, se hace cargo de ellas, las protege y les presta demasiada atención.
Sofía no para de trabajar. Además del consultorio de sexología que establecerá en el barrio, atiende el gabinete
psicopedagógico en varias escuelas. A una de ellas concurre Anita, la hija extramatrimonial de...

свернуть