Los pinchazos son una molestia común para los conductores y pueden ocurrir en los peores momentos. Casi todos los conductores enfrentarán un pinchazo en algún momento, entonces, ¿qué necesita saber si le sucede a usted?

Los neumáticos de los automóviles están calibrados para soportar una cierta cantidad de presión. Esto asegura una marcha suave y uniforme. Conducir con una llanta desinflada puede ser riesgoso tanto para usted como para su automóvil, por lo que es posible que desee limitar la distancia que conduce y repararlo lo antes posible. Estos son algunos de los posibles peligros que plantea:

1

Daños irreparables en los neumáticos

Si bien un pinchazo externo a menudo se puede reparar, conducir con un neumático desinflado puede dañar la estructura interna de sus neumáticos. Este daño interno puede ser irreparable, en cuyo caso deberá reemplazar completamente el neumático.

2

Daños a sus llantas o vehículo

Conducir con un neumático desinflado significa que es probable que las llantas hagan más contacto con la carretera de lo que deberían. Esto puede doblarlos fuera de forma. El uso continuado de esta manera puede incluso causar daños al propio vehículo.

3

Pérdida de control en la carretera

Un neumático desinflado puede conducir a un manejo inseguro, posiblemente incluso a la pérdida de control, porque el neumático no responde tan bien a la dirección. Esto podría crear una situación de conducción peligrosa.

4

Conducir con una llanta de refacción

Si pudo reemplazar su pinchazo con el neumático de repuesto más pequeño en forma de rosquilla en la cajuela, es mejor no conducir con él por mucho tiempo. Los repuestos no están diseñados para el uso diario y, por lo tanto, tienen limitaciones sobre qué tan lejos y rápido puede conducir con ellos. Son reemplazos temporales para llevarlo de manera segura al taller más cercano.

свернуть