Importancia de la Reserva Forestal Protectora Productora de la Cuenca Alta del Río Bogotá.
La Reserva Forestal Protectora Productora Cuenca Alta rio Bogotá se encuentra ubicada en las áreas montañosas que enmarcan la Sabana de Bogotá, localizada en la jurisdicción de las áreas rurales de 27 municipios de Cundinamarca incluyendo el distrito capital, desde el nacimiento del Río Bogotá hasta el Salto de Tequendama con una extensión de 94.000 hectáreas.
El 43% del territorio de La Reserva contiene gran cantidad de zonas de recarga hídrica subterranea, además de tener acuíferos que garantizan la conectividad del flujo del agua con la parte media y baja de la cuenca, cuenta con 18 subcuencas de tercer orden que abastecen 70 millones de m3/año aproximadamente en aguas superficiales, otorgadas en 3806 concesiones para 41 municipios de la sabana de Bogotá. Contribuye al abastecimiento de aproximadamente 205 acueductos veredales con una demanda aproximada de 4.738.284 m3/año.
Tres ecosistemas claves se protegen aquí, el ecosistema de páramos y el de bosque altoandino como elementos fundamentales en la regulación del agua en un 39% del territorio y en el 8% de la Reserva se encuentra la casi totalidad del último ecosistema subxerofítico andino que existe actualmente en el país.
La Reserva cuenta con una gran biodiversidad de especies de flora y fauna que incluyen 807 especies registradas de las cuales 97 son endémicas y cuatro nuevos hallazgos para la ciencia. Esa diversidad también se manifiesta en las 30,320 personas que habitan este espacio, relacionándose de diferentes maneras con el territorio.
Además compartimos territorio con un resguardo y dos comunidades indígena Muiscas y una comunidad indígena Kichwa.
Las actividades realizadas en la Reserva son principalmente agropecuarias, forestales, de extracción minera y de diferentes usos residenciales. Sin embargo no todas estas actividades están permitidas de la manera como actualmente se hacen en la Reserva, ya que ésta se encuentra inmersa en un contexto regional más amplio que se beneficia de los bienes y servicios ambientales que provee.
Por esta razón el Plan de Manejo de la Reserva genera los lineamientos por los cuales se deben regular estas actividades. Al implementarlos permitirán salvaguardar esa riqueza natural y cultural, haciendo que esas características únicas sigan interactuando en el territorio para el beneficio de todos.
Este plan de manejo contempla unos objetivos de conservación que buscan mantener la riqueza y funcionalidad de la biodiversidad y la prestación de los servicios ecosistémicos que prestan a la Reserva y a la Sabana de Bogotá.
Estos objetivos se buscan cumplir a través de:
• El aumento de las coberturas nativas en las áreas de importancia para la regulación y la conectividad de los ecosistemas de páramo, bosque altoandino y subxerofítico,
• La armonización de los sistemas de producción y la habitabilidad preexistentes para mejorar la regulación hídrica y la disponibilidad de hábitat para la biodiversidad en las zonas transformadas
• Incentivar prácticas culturales en armonía con los objetivos de conservación, y fomentar la gestión institucional y comunitaria de la Reserva.
La Reserva tiene un papel fundamental en el desarrollo regional, ya que articula las áreas protegidas de la Sabana de Bogotá y brinda beneficios para los sectores productivos ubicados en este territorio. Además permite establecer un pacto regional y sectorial que incentive el desarrollo de actividades económicas en el centro del país, bajo una mirada que no implique su continua sustracción, dejando cada vez con menos opciones de conectividad y manejo esta invaluable ecosistema para el país. Se busca ampliar los mecanismos de participación comunitaria en procesos locales y articular los aportes de los sectores públicos y privados de la región generando apropiación social y respaldo a la Reserva.
