Vicente Serrano, el famoso conductor que dejó sus oficinas de Chicago para instalarse en el programa "Éntrale sin Miedo" difundido en la emisora La Octava, entre otras plataformas, renunció anoche porque "se le trató de imponer una línea en los temas a tratar y en el estilo de hacerlo", lo que, por dignidad, le pareció inaceptable. Al parecer, el autor de este acto abierto de censura periodística podría ser nada menos que el paladín de la libertad de expresión, don Julio Hernández López, "Astillero", aunque usted, no lo crea, comentan Ángel y Jesús López, de Notiguía.
