En esta UFM Talk, las hematólogas pediátricas Thelma Velásquez y Jeanine Alfaro hablarán acerca de los tumores sólidos en pacientes pediátricos, las alternativas disponibles para su curación, los retos a los que se enfrentan, los tratamientos y ejemplos de casos.

Thelma comienza aclarando que los tumores sólidos son una proliferación anormal de células que, por alguna razón, no mueren cuando deberían, lo que conduce a su proliferación y la formación de tumores. Comenta que estos tumores pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo y que los síntomas que presenta el paciente dependen del lugar donde se desarrollen.

“Cada procedimiento quirúrgico y tratamiento es diferente según la ubicación y la proliferación del tumor en cada paciente”. — Thelma Velásquez

La doctora Thelma menciona que en la categoría de tumores sólidos se encuentran una serie de tumores que se originan en tejidos blandos o huesos. Destaca que estos tumores a veces se consideran "benignos" debido a su falta de capacidad para hacer metástasis. Sin embargo, recalca que, a pesar de su falta de capacidad para hacer metástasis como los tumores malignos, los tumores sólidos a menudo requieren tratamientos igual de agresivos que los cánceres invasivos. Señala que con frecuencia estos tumores aparecen en extremidades vitales y, debido a su tamaño, pueden requerir amputaciones o causar la pérdida de funcionalidad en la extremidad.

“Que no sean tumores benignos no significa que no sean invasivos o peligrosos”. — Thelma Velásquez

Thelma menciona que los tratamientos para este tipo de tumores incluyen radioterapia, quimioterapia y cirugía. Sin embargo, destaca que la cirugía es el único método para lograr la curación de estos tumores. Comenta que la dificultad del procedimiento quirúrgico depende de la proliferación e invasión del tumor. Resalta que, en muchas ocasiones, debido a una detección tardía del tumor, es necesario realizar amputaciones o extirpar huesos completos. Sin embargo, también menciona que en la actualidad se buscan candidatos en condiciones óptimas para llevar a cabo cirugías que preserven la extremidad. La doctora señala que el resultado satisfactorio de cualquiera de los dos procedimientos, ya sea la amputación y el uso de una prótesis o la preservación de la extremidad, depende de la aplicación y la respuesta óptima del cuerpo a las terapias y medicamentos proporcionados por el médico.

“Si nuestro paciente continúa experimentando molestias y presenta síntomas de un posible tumor después de dos semanas de tratamiento, es preferible realizar una radiografía para detectarlo con anticipación”. — Thelma Velásquez

En pediatría, se presentan una variedad de desafíos en relación a los tumores sólidos. Sin embargo, la doctora comenta que uno de los desafíos más significativos es la detección temprana del tumor con la menor cantidad de proliferación posible. A menudo, estos tumores se confunden con infecciones, pero la doctora recomienda que si después de dos semanas el paciente sigue experimentando molestias, se busque otro diagnóstico. Thelma menciona que se dispone de un período de 86 días para detectar el tumor, por lo que recomienda realizar una radiografía después de dos semanas para detectar o descartar cualquier tumor sólido y no pasar por alto síntomas persistentes como dolor o limitación de movimiento en las articulaciones. Además, recomienda hacer una radiografía para la detección del tumor antes de realizar una serie de exámenes, ya que considera que podría perderse un tiempo valioso en el tratamiento.

“Independientemente del tamaño del tumor, todos los pacientes tienen la posibilidad de responder de manera efectiva a los tratamientos y procedimientos quirúrgicos”. — Jeanine Alfaro



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