Tanto para apoyar a Ucrania, como para garantizar su propia defensa ante Rusia, los países europeos de la OTAN aún apuestan por Estados Unidos.
Para proteger su flanco oriental, la OTAN prevé despliegar hasta 300.000 efectivos a principios de 2025. Pero justo en ese momento podría llegar a la Casa Blanca un presidente contrario a esos planes. Por eso, a largo plazo, la actual apuesta europea podría dejar de ser segura.
Los expertos aseguran que el reto de Europa no solo radica en rearmar a los ejércitos del viejo continente. Señalan que también es clave estar alerta ante las amenazas que surgen en su propio territorio. Sin recurrir a ningún tanque, Rusia socava las democracias occidentales difundiendo falsedades en sus procesos electorales. “El ataque más peligroso es aquél que no se aprecia a simple vista y cuyo objetivo es llevar a los ciudadanos a dejar de creer en la democracia", asegura Marina Miron, doctora e investigadora del Departamento de Estudios de Guerra en el King's College de Londres.
Una crónica de Laura Iglesias San Martín y Aldo Sánchez Vera
para DW#Analiza, con participaciones de:
Marina Miron
Doctora e investigadora en el Departamento de Estudios de Guerra del King's College de Londres e Investigadora honoraria en The Centre for Military Ethics
Mira Milosevic
Analista Senior para Rusia, Eurasia y los Balcanes en el Real Instituto Elcano, Profesora Asociada de La Política Exterior de Rusia en la IE University's School of Global and Public Affairs.
Gerhard Mangott
Profesor de Ciencias Políticas especializado en Relaciones Internacionales y Estudios de Seguridad en el espacio postsoviético en la Universidad de Innsbruck. Sus investigaciones se centran en la política interior y exterior rusa, la política exterior estadounidense, las relaciones entre grandes potencias, el control estratégico de armamentos y la proliferación nuclear.
