La policía de la Ciudad de Buenos Aires a las 3 de la mañana recorría la avenida Montes de Oca al 600 cuando observó la cartelería de un bar encendida y al detenerse escuchó música muy fuerte. Fue por ello que solicitó la presencia de la división operaciones especiales del ministerio público y al ingresar, encontraron a más de 100 personas en un local de 60 metros en el cual no podía haber más de 15 de acuerdo a la normativa vigente. El local fue clausurado, se secuestraron equipos y el dueño, un hombre de 36 años, fue imputado por infracciones contra la ley.
