El plástico está en todas partes. Está en los alimentos que comemos, en el agua que bebemos e incluso dentro de nuestro cuerpo. La industria y los países productores de petróleo quieren hacernos creer que NECESITAMOS plástico y que podemos reciclarlo o quemarlo para solucionar el problema. Pero todos sabemos que la contaminación por plástico no empieza cuando se bota. El plástico ES contaminación, desde el momento en que se extraen combustibles fósiles para fabricarlo.

Mientras los líderes se reúnen en Ottawa para la cuarta ronda de negociaciones del tratado sobre el plástico esta semana, ¡exijamos un tratado que reduzca la producción de plástico!

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