[ Ссылка ] La OPEP prevé un menor crecimiento de la demanda de petróleo para el año que viene. Aunque mantiene prácticamente intacta la previsión para este año, la Organización de los Países Exportadores de Petróleo pronostica que la progresión se ralentizará a causa de las incertezas en la economía mundial. Las mayores dudas provienen de la solución en la crisis del euro.
Para este año, la demanda de crudo se sigue situando en torno a los 88,7 millones de barriles diarios y unos ingresos de 1,15 billones de dólares. Para el que viene y a pesar de un aumento a 89,5 de barriles diarios, los ingresos deben bajar.
La ralentización económica mundial se ve contrarrestada por la recuperación en Japón, el abandono del nuclear y el dinamismo de países no industrializados. Por otra parte, los precios de referencia del petróleo se sitúan por primera vez en un año y medio por debajo de los cien dólares.
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