El ex convento de san pedro y san pablo en Yuriria una joya arquitectónica de la nueva España con casi 500 años de historia.





Al sur del estado de Guanajuato en el corazón del pueblo mágico de Yuriria y enmarcado en un espectacular paisaje se encuentra el ex convento agustino de san pedro y san pablo, sencillamente conocido como el exconvento de Yuriria, su construcción dio inicio hace 472 años y fue terminado 9 años después e inaugurado el jueves de corpus del año 1559

Su arquitectura es de estilo plateresco sencillo. Es considerado uno de los edificios mas representativos de la arquitectura novohispana del siglo 16 y destaca por los elementos de arte tequitqui que peuden encontrarse en los acabados de la edificación que muestran una mezcla entre los motivos clásicos cristianos y las manifestaciones artísticas indígenas autóctonas de la región .


En 1933 fue declarado Monumento Nacional para su conservación y Desde el año de 1992 se le de una museografía adecuada para la exhibición de las colecciones de bienes culturales prehispánicos y virreinales que son parte de su acervo: piezas de las culturas chupícuaro y purépecha, más óleos y esculturas de arte sacro cristiano


el convento llegó a tener tal importancia en la región de Yuriria que en él se estableció el Colegio Agustino de San Pablo, el cual sirvió, durante más de 300 años, como alta casa de estudios de la orden y seminario donde se enseñaba “artes [leyes civiles y eclesiásticas, filosofía] y teología”. Hoy en dia es un museo a cargo del instituto nacional de antropologia e historia.
La entrada al convento es a través del “pórtico del racionero” formado por cuatro arcos con columnas pegadas a una pared o a otra columna
El edificio se desarrolla alrededor de un patio cuadrado con un par de corredores que lo rodean en dos niveles, por los cuales se tiene acceso a las habitaciones de la planta baja así como a los corredores que sirven de vestíbulo a las celdas de la planta alta;
Todavía son visibles a simple vista las pinturas al fresco que adornan las paredes del monasterio y los detalles del techo que asemejan nervaduras.
Llama la atención lo que parece ser una escena de la matanza de los inocentes descrita en el evangelio de Mateo.
En la parte alta, mirando hacia el pozo y patio central, existen gárgolas con las figuras que acompañaban a los evangelistas: toro, águila, león y ángel.
La cocina, hoy ocupada por una parte del museo, las despensas, el granero, la llamada sala de profundis y el refectorio se localizan en la parte baja y más antigua del convento.

Sin duda una experiencia inigualable e imperdible si se visita esta parte del estado de guanajuato , una joya mas de nuestro estado , para el mundo.

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