El cristianismo no es una ideología, es una revelación divina. Por favor que no se asuste nadie, la vocación de Descartes y muchas cosas que descubrió fueron revelaciones divinas.
La iglesia católica en toda su historia ha matado muchísimo menos que la razón en 90 años. La razón desarrollada por el marxismo y el fascismo. La razón atea sin compasión ninguna hacia otro ser humano. Desde la lucha sangrienta de Marx enfrentando una clase contra otra, hasta la eliminación del débil o el diferente basado en teorías de Kant, Hegel y Nietzsche.
La Iglesia Católica, en toda su historia provocó, directa, e indirectamente, la muerte de entre 25 y 30 millones de personas en las cuatro cruzadas, las múltiples ejecuciones del Santo Oficio en Europa y América.
En la segunda guerra mundial la mayoría de los especialistas reconocen entre 40 y 50 millones de muertos (más de la mitad de ellos civiles), el doble o triple de heridos y otros 50 millones de desplazados. forzosos o deportados.
Las estimaciones acerca de las muertes causadas por el régimen de Stalin en la Unión Soviética varían entre 43 y 51 millones, mientras que los relativos a la China de Mao oscilan entre 50 y 75 millones.
Por esto tengo que decir que prefiero a un cristiano antes que a un ilustrado. Y puestos a razonar prefiero a San Agustín, Guillermo de Ockham, Tomás de Aquino y Francisco de Vitoria a Kant, Hegel, Marx y Nietzsche.
Referente al humanismo de Carlos Marx tengo que decir que en sus escritos no hay nada de humanidad. Exceptuando un libro que se publicó 50 años después de su muerte y que se dice que fue de él, pero es una evidencia que no lo escribió Marx. Me refiero a los Manuscritos económicos y filosóficos o Manuscrito de economía y filosofía o Cuadernos de París.
La izquierda Cristiana tiene que ver con la justicia social y no con la lucha entre clases o el predominio de un superhombre sobre otro hombre. La justicia social viene de la doctrina social de la iglesia y no de los filósofos de la razón.
La izquierda cristiana en mi opinión sostiene que la justicia social, la renuncia al poder, la humildad y el perdón son regalos de Dios a través de su revelación de amor. La Biblia contiene relatos de Jesús repetidamente defendiendo a los pobres y los marginados frente a los poderosos y ricos; la Izquierda Cristiana sostiene según yo entiendo que esa postura es relevante e importante. De acuerdo con su interpretación del "poner la otra mejilla", que sustituiría al "ojo por ojo" del Antiguo Testamento.
Mi entender me dice que la Izquierda Cristiana se inclina más hacia el pacifismo en la oposición a las políticas de promoción del militarismo.
Si bien socialistas no religiosos a veces han encontrado apoyo para el socialismo en los Evangelios (por ejemplo Mijaíl Gorbachov que llegó a citar a Jesús como "el primer socialista"), la Izquierda Cristiana no puede considerar bajo mi punto de vista al socialismo/comunismo como un fin o un medio único adecuado. La fe cristiana es la base de su creencia, que a su vez exige la propia justicia social.
La relación entre izquierdas y cristianismo en la misma que las derechas y el cristianismo. Porque no son las opciones políticas las que construyen el reino de Dios sino las acciones concretas. Por esto nuestra Constitución española fue firmada por comunistas, socialistas, monárquicos, de derechas y de izquierdas a petición del Rey Juan Carlos I que renunció a su poder por el bien del pueblo español, por esta labor un grito en toda Europa pidió que se le concediera al rey de España Juan Carlos I el Premio Nobel de la Paz, que estuvo a punto de conseguir.
El rey Juan Carlos y Adolfo Suárez consiguieron una cosa impensable, y es que las Cortes franquistas se autoinmolaran para crear libertad y elecciones democráticas. No olvidemos que el régimen franquista ha sido uno de lo gobiernos más asesino y criminal que ha existido.
El rey y el movimiento Nacional tenía tanta fuerza en España que podía haber gobernado sin ningún problema como lo hizo tantos años Franco y como lo está haciendo ahora el rey de Marruecos y su corte en nuestro país vecino.
