MARÍA SE CONVIERTE EN LA MADRE DE JESÚS, EL HIJO DE DIOS.

Dios envía un Ángel mensajero a una casa donde vivía una niña de apenas 15 años que tenía un gran corazón lleno de amor. Ella se llamaba María y vivía en un pueblo llamado Nazaret hace más de 2000 años.

María fue elegida por Dios para ser su Madre, para ser Madre de Dios. María era muy buena y amaba a Dios y a todos, hacía todo con amor. Por eso era perfecta para ser Madre de Dios, porque Dios es Amor.

Como Dios nos quiere tanto nos regaló a su Madre y desde entonces María es tu Madre, es la Madre de todos. Dios Padre y María, los Padres de Jesús, son Nuestros Padres y Jesús es nuestro Hermano. Somos una Familia.

La noche en que llegó el Ángel a la habitación de María, Ella estaría hablando con Dios, diciéndole que quería que la vida sea mejor en el mundo, que quería que viniera al mundo el Salvador de la Humanidad, el Salvador que Dios había prometido regalar a su Pueblo y a su familia desde hace muchísimo tiempo, el Salvador que iba a venir a salvarnos del mal y traernos a todos una Vida feliz, llena de amor y de paz, una Vida en el Cielo, en otro mundo mejor que duraría para siempre.

El Ángel dice a María que Dios la ha elegido para ser la Madre del Salvador del Mundo. Le dice que su Hijo se llamará Jesús y será llamado Hijo de Dios.

María acepta convirtiéndose en su Madre a través de un milagro. Fue un milagro de Dios porque el Hijo de María no tuvo padre como todos los niños, sólo tuvo Madre y ningún hombre fue el verdadero padre del niño. Su Padre es Dios. Es Hijo de Dios y de María.

Que Dios sea el Padre del Hijo de María es algo único, extraordinario, pero ''todo es posible para Dios'' y para el que cree y confía en Él.

María pondrá a su hijo el Nombre de Jesús, como le dijo el Ángel, porque Jesús significa Salvador y es el Nombre que Dios quiere tener. Dios quiere que Jesús salve a todos los hombres, que inaugure una nueva era y abra las puertas cerradas del Cielo, el Paraíso que Jesús abrió a la Humanidad entregando su Vida por amor a nosotros.

Jesús es Hijo de Dios y también es Dios. Es Dios hecho Hombre. Es Dios y Hombre a la vez sin dejar de ser Dios. A Jesús le damos varios de estos nombres: el Niño Dios, el Hijo de Dios, Hijo de Dios Padre, Dios Hijo, Dios hecho Hombre...

Al Misterio de que Dios se hizo Hombre lo llamamos Encarnación. Encarnarse es hacerse carne. Dios es Amor, es Espíritu, no lo vemos, pero adquirió un Cuerpo de Hombre, hecho de carne, que se puede ver y tocar.

Dios es el Amor, es Uno Sólo. Es la unión de Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo. Son Tres Nombres que damos a Dios. Los Tres son Dios, un sólo Dios porque son inseparables, son como una familia, están unidos en el Amor. Los tres son el Amor pero tienen características distintas y así Dios recibe estos tres nombres. Dios es a la vez Padre, Hijo y Espíritu.

Dios Padre es el Padre de Jesús. El Padre no se hizo Hombre, no tiene Cuerpo, Dios Hijo sí.

Dios Hijo es Jesús. Es Dios e Hijo de Dios Padre. Existía desde siempre sin su Cuerpo y Unido al Padre de forma espiritual. Hace 2000 años, Dios Hijo se hizo Hombre pero siguió siendo Dios y estando unido a Dios Padre. Jesús sabía que Él y el Padre son Uno. Él llamaba 'Padre' a Dios y lo conocía. Vino al mundo para enseñar a los hombres Quién es Dios.

Dios Espíritu Santo es el Espíritu de Dios Padre y también de Jesús. Jesús nos envió su Espíritu cuando terminó su Vida de Hombre en la Tierra y volvió con su Padre al Cielo, para que su Espíritu se quedara para siempre con nosotros.

El Espíritu de Dios realizó el milagro de que María sea Madre de Dios, que su Hijo sea Dios y que su verdadero Padre sea Dios y no José (el esposo de María que adoptó a Jesús como un hijo). El Espíritu de Dios formó el Cuerpo de Jesús en el Vientre de María. A este Cuerpo y Alma se unió la Divinidad de Dios. La Encarnación junto con la Resurrección de Jesús es el acontecimiento central de la historia.

La Anunciación a María y la Encarnación del Hijo de Dios se celebran el 25 de marzo, nueve meses antes de Navidad, cuando es primavera en el Hemisferio Norte. Se traslada de día si coincide con fiestas de Cuaresma y Pascua que cambian cada año. Se conmemora con mayor relevancia junto con el Nacimiento de Jesús, en Adviento y Navidad. Los cristianos coptos y armenios lo celebran el 6 de abril y el 7 de abril los ortodoxos. En Grecia es fiesta nacional.

Dios que es Amor, por amor a los hombres que somos sus hijos, quiso vivir con nosotros, vivir una Vida en el mundo siendo igual a nosotros, vivir siendo Hombre sin dejar de ser Dios.

Así que el Amor vivió con nosotros para dar un importante mensaje a nuestra vida. Dios nos ama, quiere que vivamos con amor en el mundo y quiere regalarnos otra Vida mejor cuando termine la vida en este mundo. Quiere regalarnos una Vida en la que solo existirá el Amor y la felicidad durará para siempre.

свернуть