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Nota: Si te pica una araña venenosa como una viuda negra o araña reclusa parda, busca atención médica inmediata. Busca ayuda médica si no estás seguro de si la mordedura era de una araña venenosa.

Las arañas no se alimentan de los seres humanos como otros insectos que pican. Las arañas suelen morder como un mecanismo de defensa. La mayoría de las mordeduras de araña, médicamente conocidas como aracnoidismo, no son motivo de preocupación.

Pueden causar síntomas leves como inflamación limitada, enrojecimiento, dolor y picazón. Dependiendo del tipo de araña, los síntomas pueden durar unas pocas horas hasta varios días o incluso semanas.

Sin embargo, las mordeduras de arañas venenosas como la viuda negra o la reclusa parda son peligrosas.

En tales casos, se recomienda buscar ayuda médica, sobre todo si se presentan síntomas como hinchazón severa, dolor intenso y rigidez, espasmos musculares, fiebre y escalofríos, dolor abdominal, vómitos, dificultad para respirar y mareos.

A veces, la picadura puede no parecer seria inmediatamente, pero puede llegar a ser grave después de algún tiempo.

En el tratamiento de las mordeduras de araña, el principal objetivo es neutralizar la picadura y deshacerse de las toxinas en el cuerpo. Muchos remedios caseros eficaces pueden aliviar los síntomas y promover la cicatrización. Si los síntomas se mantienen después de unos pocos días, consulta a un médico.

Remedios caseros para las mordeduras de araña

Estos son los 10 mejores remedios caseros para las mordeduras de araña.

1. Paquete de hielo:
2. Bicarbonato de Sodio:
3. Sal:
4. Carbón Activado:
5. Patatas:
6. Aspirina:
7. Cúrcuma:
8. Jugo de Limón:
9. Aloe Vera:
10. Menta:

Sugerencias adicionales

- Monitorear la picadura durante un par de días para mantener un control sobre la evolución de los síntomas y los signos de curación.
- Tratar de memorizar o fotografiar la apariencia de la araña culpable. Esto te ayudará en el plan de tratamiento.
- Para evitar las picaduras de araña, llevar camisas de manga larga y pantalones largos, sombreros, guantes y botas para mover cajas o leña almacenada.
- Tener mucho cuidado al limpiar hangares, garajes, sótanos, áticos y espacios angostos.
- Inspeccionar y sacudir las herramientas de jardinería que no han sido usadas durante un tiempo.
- Desechar las cajas viejas, ropa y otros elementos no deseados de las áreas de almacenamiento.
- Retirar las pilas de rocas de tu jardín.

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