Las bolsas de aire delanteras se encuentran dentro del tablero y están diseñadas para inflarse y llenar el espacio entre el pasajero y el tablero para proteger a un adulto en un accidente automovilístico. Pero el riesgo de sufrir lesiones graves se duplica para los niños menores de 13 años de edad que se sientan frente a una bolsa de aire. Su hijo estará mejor protegido si viaja en el asiento trasero de su vehículo con el sistema de seguridad apropiado según la edad y el tamaño del niño toda vez que viaje.
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