Desde este espacio entendemos que la literatura está en riesgo y repudiamos la avanzada del gobierno nacional que lo único que pretende es censurar autores por hablar de temas que nos interpelan como sociedad, porque es falso que se trate de libros pornográficos.

La ficción es una de las tantas formas de interpretar la realidad y cuestionarla, y eso es lo que les molesta: el cuestionamiento a temas como por ejemplo, las mujeres muertas a manos de femicidas, por poner un solo caso, como pasa con Cometierra de Dolores Reyes.

Y lo decimos porque los mismos que hoy se impresionan por el libro Cometierra, son los mismos que apoyan a quiénes durante la dictadura cívico militar procedieron a la quema de un millón y medio de ejemplares de libros del CEAL. Nuestro total repudio a aquellos que nos roban la historia, esos de la doble vara, esos de la doble moral.

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