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El Gobierno ha decidido por primera vez en la historia de nuestra democracia el Estado de Alarma como consecuencia del caos ocasionado por la huelga salvaje de los controladores.
Sin previo aviso abandonaron el viernes sus puestos obligando a cerrarse el espacio aéreo, lo que ocasionó que el Gobierno militarizara en primera instancia el control del espacio aéreo, que no ha disuadido a los huelguistas. El Gobierno no cederá ante lo que considera un chantaje intolerable que tiene como rehenes a cientos de miles de personas en los aeropuertos del país. No acudir a sus puestos de trabajo puede suponer ahora para los controladores penas de cárcel tras este decreto aprobado en un Consejo de Ministros Extraordinario. Tras la entrega de las notificaciones a los controladores, algunos han decidido volver al trabajo.
El calvario para las más de 600.000 personas afectadas según los últimos datos de AENA comenzó el viernes por la tarde cuando los controladores aéreos abandonaron sus puestos presentando bajas masivas, lo que obligó a cerrar el espacio aéreo español y provocó el caos en los aeropuertos de toda España. Desde ese momento, los viajeros se agolpan en los mostradores de reclamaciones y en los pasillos del aeropuerto preparándose para dormir en las instalaciones, indignados ante el caos y sufriendo dramas personales.
(04-12-2010)
