Con 32 años, Alfonso Alonso, llegó a la alcaldía de Vitoria sin haber ejercido como abogado y con poca experiencia como concejal. Era junio de 1999 y aguantó la alcaldía hasta 2007. En Vitoria se destapó como un gran discutidor con una muy buena capacidad de improvisación. Un año más tarde, Mariano Rajoy le rescató como portavoz adjunto del PP en el Parlamento. En 2011 fue la voz popular en el Congreso.
