Vídeo publicado en www.tribunavalladolid.com
Se vio el lunes y se volvió a ver el martes. La ciudad de Valladolid tiene conciencia, está dispuesta a que el brote de coronavirus remita cuanto antes y para ello la población está cumpliendo de nuevo el toque de queda para quedarse en sus casas. Las únicas excepciones, las ya conocidas. Salir a por compras de primera necesidad, a los bancos o a trabajar, evitando echarse a la calle siempre que sea posible.
Este martes había además una pequeña diferencia respecto al lunes, día en que la lluvia hizo más complicada las incursiones de los vallisoletanos. Esta vez un sol lo suficientemente cálido acompañaba y hacía más tentador el salir a dar un paseo. Pero no. La Policía Municipal, en coordinación con la Nacional, ya ha impuesto varias sanciones por saltarse el toque de queda, y pese a estas deshonrosas excepciones queda patente que el público está concienciado.
Nada queda por hacer. Ser prudente, lógico y, por supuesto, mantener las condiciones de higiene. Hasta que todo ermita, algo que previsiblemente durará más de los quince días impuestos para el Estado de Alarma, la Plaza Mayor, Fuente Dorada, la Plaza de Santa Cruz, la de San Pablo, Poniente o las Moreras seguirán siendo un solar.
